En 1950
llegan al puerto de Santos las dos primeras Kombis, junto a 10 Fuscas. Se
trataba de una prueba que Volkswagen realizaba para testear el mercado
brasilero.
El
resultado de ventas no pudo ser mejor, y era tal el interés que el importador,
“Brasmotor”, vendía los vehículos a 60.000 cruzeiros, el triple de lo estimado
de venta por VW.
La propia
Brasmotor vendía la Kombi
importada, luego se dedicó a ensamblarla, siendo representante también de la
marca Chrysler.
En 1953, la
propia Volkswagen creó su filial en Brasil y comenzó la producción con
autopartes locales en setiembre de 1957.
Todas montaban el mismo motor de 1.190 cc, y 36 CV, con el cual llegaban a una
máxima de 100 km/h .
No contaba con caja sincronizada ni luces de giro.
La
miniatura de Ixo tiene la particularidad de reproducir aquella
primera serie de Kombis brasileras, y han tenido en cuenta el detalle de no
incluír las luces de giro delanteras. Presenta también una pintura a dos tonos, de los cuales el gris tiene una curiosa terminación mate.
CRUISER
muy buena, con todo el incombustible encanto de lo clásico
ResponderEliminarMe alegro que la hayas conseguido, es una bonita pieza y a precio muy conveniente.
ResponderEliminarTambién a mí me agradó y puede hacerle frente a miniaturas de mayor enjundia.
ResponderEliminarY no es la alemana, es la brasileña, añade rareza!
Justamente, lo atractivo de esta miniatura y de las que veremos en próximas entradas es que han puesto empeño en reproducir las versiones brasileñas.
ResponderEliminarSaludos!
Muy buena, la kombi tal como conocimos en nuestra infancia; junto a la Auto Unión, las más lindas de todas, incluidas las que vinieron después.
ResponderEliminarEso si, “Brasmotor” se llenó los bolsillos de plata...
Abrazo!