El primer
Rastrojero vió la luz en 1952. Su apariencia frontal era una mezcla entre un
Jeep y una coupé de Turismo de Carretera. El motor era originalmente el Willys Overland de 2,2 litros y utilizaba
un chasis similar a los modelos de autos Ford de 1937. Cuando la partida de 2.365 motores Willys que el Instituto Argentino de Promoción e Intercambio (IAPI) había importado de Estados Unidos se terminó, la empresa decidió llamar a concurso para equipar al utilitario con un motor Diesel que le confiriera aún más economía de uso.
La ganadora del concurso fue la empresa alemana Borgward, con su impulsor D4M de 1.758cc y 42 CV de potencia. Equipó a las versiones mas fabricadas y vendidas, superando las 26 mil unidades.La pequeña
caja de madera permitía transportar hasta media tonelada de carga. Su aspecto
era muy rústico pero prontamente su excelente desempeño terminó imponiéndose a
las consideraciones estéticas y fue muy demandado, convirtiéndose en un éxito
inmediato de ventas, tanto en áreas rurales como para transporte y reparto en
las urbanas. La demanda,
que crecía a pasos agigantados hizo que la versión de motor gasolero fuera más
exitosa aún que la anterior.
Durante la
fabricación de esta primera generación, que se mantuvo en oferta hasta 1968, el
modelo presentó sucesivas variantes y pequeños rediseños y mejoras: Su parrilla
cambió al menos en tres oportunidades, y se reconocen por el número de lamas
horizontales que la componían. También el parabrisas de dos piezas planas
partidas al medio por un parante dio paso a uno curvo de una sola pieza. Los guardabarros rectos se modificaron levemente incorporando unas líneas curvas en su sector frontal. El volante de tres radios pasó a ser de dos a fin de brindar al conductor de largas distancias la posibilidad de descansar sus brazos en ellos.
Existían
versiones con caja de madera, metálica e incluso de doble cabina, con una
segunda fila de asientos. En 1968 se presentó una evolución que cambiaba
totalmente la estética y lucía mucho mas moderna. Esperemos hablar de ella en
una futura aparición de la misma en la serie “Autos Inolvidables Argentinos”.
El ejemplar
que nos ocupa ahora forma parte de la colección “Vehículos Inolvidables de
Reparto y Servicio”, de la editorial Salvat, serie que es simultánea y
complementaria a la de Inolvidables. Reproduce un ejemplar real que ha sido
restaurado y actualmente presenta la apariencia del de la maqueta.
Es
complementario al que hemos visto en la entrada anterior, ya que se trata de un
modelo producido diez años después de aquél. El fabricante ya era Dinfia en reemplazo de IAME (sólo un cambio de nombre administrativo) Se notan los cambios estéticos que presentaba el restyling de la primera generación, y que han sido rigurosamente reproducidos por los encargados de la investigación y la miniaturización. El resultado es una maqueta muy simpática y vistosa, como única crítica debemos anotar el olvido de los matriceros en reproducir las pequeñas molduras que presentaban los guardabarros en sus partes superiores.
La
decoración remite a la famosa bebida “Amargo Obrero” un aperitivo fabricado en
Rosario por la industria Tacconi. Aún existen tanto la fábrica como el
producto. Tiene pocos retoques, reducidos al coloreado de interiores y caño de escape.
Esta maqueta es otra de las inéditas que integran las series de Salvat, muy bienvenida y esperada por suerte. Dentro de la gama de estos pintorescos Rastrojeros aún hay mucho para ver y rescatar para la historia en forma de maquetas 1/43, y según rumores bien fundados, es muy posible que los veamos aparecer en estas dos exitosas colecciones.
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