jueves, 23 de marzo de 2023

VOLKSWAGEN GOLF III GTi (1996)

En el año 1991 Volkswagen presentaba la tercera generación de su modelo mundial más exitoso: el Golf. Manteniendo la distancia entre ejes y trochas de su antecesor, su imagen no difería demasiado y se tornaba bastante conservadora, a fin de no arriesgar la fórmula que lo había llevado a ser uno de los autos más exitosos del mundo en ventas.



En la segunda mitad de 1995 el Golf GTi llegó a Argentina importado desde México. A pesar de su aura deportiva aquella versión de tercera generación sólo desarrollaba 115CV, aunque su arquitectura estaba dispuesta para alojar hasta un motor de seis cilindros (versión Golf VR6 con el motor 2,8 litros del Passat.



Exteriormente, los parantes “C” gruesos eran los elementos visuales más tradicionales que el Golf mantenía desde su primera generación, y lo que le confería su bien ganada imagen de robustez. Su aspecto de cuña le confería un coeficiente de penetración aerodinámica de 0,34, nada mal para un hatchback.



El motor de 2 litros de origen Audi equipaba también por aquellos años a los modelos Pointer GTi, Passat, Quantum, Ford Galaxy y Seat Ibiza. Alcanzaba una velocidad máxima de 190 km/h, acelerando de 0 a 100 km/h en 11 segundos.



El Golf GTi había logrado un perfecto balance entre confort de marcha, habitabilidad y prestaciones, sumándole a eso un consumo contenido. Era menos gastador de combustible que los demás modelos nombrados que compartían la motorización.



El Golf de tercera generación fue reemplazado por el de cuarta, en el año 1997. 




La miniatura es de la colección Autos Inolvidables Argentinos de Salvat.



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jueves, 9 de marzo de 2023

IAME INSTITEC JUSTICIALISTA SEDÁN (1954)

 

En el año 1949, un decreto presidencial habilita a Institec (Instituto Aerotécnico de Córdoba) a producir automóviles además de aviones. Paralelamente a la discontinuación del proyecto “Pulqui” de avión a reacción, se decide comenzar la industrialización de vehículos y utilitarios urbanos y rurales.



La división automóviles estuvo a cargo de los ingenieros José Higinio Monserrat y Raúl Gómez. El primer automóvil que la empresa produjo era un pequeño sedán de dos puertas, cuyo diseño se inspiraba en las líneas del Chevrolet 1951 y equipaba la mecánica DKW de tres cilindros, dos tiempos y 800cc.



El coche se diseñó y construyó en apenas tres meses, integrado por gran parte de piezas de fabricación local en cuanto a materia prima y elementos componentes. El plan era producir 5.000 unidades por año, ritmo que recién se logró en 1955.



La producción en serie era muy precaria, los procesos distaban de ser óptimos y la terminación artesanal constituía un gran porcentaje del conjunto. Luego de salidas de fábrica las primeras unidades se hicieron grandes demostraciones en la ciudad de Buenos Aires. Los precios al público eran bajos, pero aún así las ventas fueron pobres. Entre todas las versiones del Justicialista se lograron fabricar 3.730 unidades, muy lejos de los 60.000 Rastrojeros que salieron de la misma fábrica posteriormente. Es que gran parte de los compradores no adquiriría jamás un coche con el escudo y la inscripción “Justicialista” en su carrocería.



La vida del Justicialista Sedán duró cortos tres años. El golpe militar de 1955 canceló todos los proyectos de coches deportivos de la empresa y sólo el sedán y la pickup sobrevivieron por dos años mas, con el nombre de Graciela, con los motores DKW reemplazados luego por los de origen Wartburg, provenientes de Alemania Oriental.



Aunque la razón última por la cual se termina la aventura comercial del Justicialista haya sido el golpe militar, lo cierto es que la fábrica nunca tuvo el equipamiento ni la logística necesarios para producir un coche de calidad en gran escala. Además con el golpe llegó la proscripción del peronismo como partido político legal, y aún los que ya tenían su coche comprado con anterioridad no se sentían muy cómodos circulando por las calles portando aquellos emblemas.



La miniatura es de fabricación artesanal. Partí de la base de la pick up producida por Salvat, aunque le modifiqué un tanto la curvatura del capó para hacerla más realista. Para la fabricación de la mitad trasera utilicé partes de carrocería de un VW Beetle y de un taxi Checker, como “donantes de órganos”. Los guardabarros los materialicé en plástico. 



Como sostuve en otros casos similares, pensando que la editorial cesaría la producción de moldes nuevos y nos dejaría sin este ejemplar, que por su importancia histórica en el proceso de industrialización y de perfilamiento de nuestro país como productor de automóviles, decidí hacer una maqueta artesanal.  Considero imprescindible en cualquier colección de coches locales que se precie de tal la presencia de un Justicialista o un Graciela, si fuera posible ambos. Si aún así aparecen algún día moldes industriales de los mismos, bienvenidos serán!

 

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viernes, 3 de marzo de 2023

CHEVROLET COMODORO COUPE (1975)

 

La versión tope de gama del Opala en 1975 era la “Comodoro”, tanto en 4 puertas como en coupé.



Como el resto de los Opala brasileños, su carrocería derivaba del Opel Rekord C alemán. Para 1975 ya habría sufrido un rediseño que afectaba al sector frontal y a las ópticas traseras, que recordaban las del Corvette americano. 



Su exterior llamaba la atención por presentar el sector trasero del techo cubierto con vinilo.



Contaba con el motor Chevrolet 250 de seis cilindros en línea, de ubicación delantera longitudinal, con tracción trasera. Tenía 4.093cc y estaba asociado a una caja de 4 marchas.



El impulsor rendía 171CV y llegaba a una velocidad máxima de 190 km/h. En ruta rendía 11 kilómetros por litro de gasolina, y en ciudad bajaba a 8 km/litro. Aceleraba de 0 a 100 km/h en 11,7 segundos.



La dirección era hidráulica y los frenos delanteros eran de discos, son suspensión delantera independiente. Medía 4.671mm de largo, con una distancia entre ejes de 2.667mm. Su peso era de 1.170kg.

 


La miniatura es de la Chevrolet Collection, editada en Brasil.


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