Eran entonces malos tiempos para el Bel Air. El que había nacido como marca "top" para autos tamaño familiar, ahora era la entrada de gama, por detrás del Caprice y el Impala, aunque la compañía lo diseñó y promocionó como un "pequeño Cadillac".
Se trataba de un coche enorme, con equipamiento básico y espartano, y motores de alto consumo. El más estándar era un seis cilindros de 4,1 litros, pero su consumo se disparaba a las nubes. El coche presumía de tener un doble techo de acero para lograr con ello más aislación sonora, pero todo ese peso extra penalizaba el consumo.
Esa característica, que en otros tiempos no hubiera tenido mayor importancia, sí pasó a tenerla luego de la Crisis del Petróleo de la OPEP de 1973/74. Chevrolet recurrió a una medida desesperada para atraer clientes: instaló en el coche un "Econominder", sistema de monitoreo que pretendía advertir al conductor acerca del consumo instantáneo pero sólo lograba hacerle recordar que había invertido sus ahorros en un coche que devoraba carburante sin piedad.
Lejos del glamour de otrora, y lejos también de los pequeños compactos europeos que por entonces ascendían en los ránkings de ventas, el Bel Air transitaba sus últimas millas en las carreteras americanas. De 315.000 unidades vendidas en 1971, no alcanzó las 16.000 en 1975, y el modelo fue discontinuado al año siguiente. Sólo se siguió usando el nombre en Canadá hasta 1981.
Lejos estaba del pico máximo de sofisticación que había logrado entre 1955 y 1959, cuando materializaba el "American way of life" y las estrellas de Hollywood se paseaban en el mismo coche que el ciudadano común podía comprar.
El ejemplar de la miniatura corresponde al modelo de 1974. El Bel Air se diferenciaba exteriormente del Impala por tener sólo dos pares de ópticas traseras en lugar de tres, y menos elementos ornamentales.
La miniatura es Ixo, y pertenece a la colección James Bond, participó en la película "Live and let die".
CRUISER
Hermoso bote, me recuerda mucho al Dodge Mónaco!
ResponderEliminarP.D: Repito que me tenes que conseguir algún auto de esta colección, please!
Sabía que lo ibas a notar enseguida Mauro. De perfil son prácticamente idénticos el Dodge Monaco 74 y este Impala/Bel Air contemporáneo... Evidentemente el espionaje industrial en esos años tenía buena mano de obra... Hasta en los detalles mínimos son prácticamente iguales.
ResponderEliminarSaludos!
TREMENDA LANCHA!!! Que me gustan a mi los coches estos que deberian salir con un adhesivo trasero que pusiera FUCK THE FUEL ECONOMY, son bestiales y encima con conductor y todo...Es una pieza muy apetecible, y expuesta, una vez mas, en un marco incomparable y tambien, una vez mas, mi mas cordial Enhorabuena
ResponderEliminarSalu2
Joserra
Una pieza muy buena y unas proporciones muy logradas, otro de los encantos de esta gran colección, que ha dejado un buen sabor de boca.
ResponderEliminarUn saludo.
Este lo estaba esperando ver, pero como Impala, por las 4 puertas. Mi padre tuvo uno del 73. De caulquier manera, esta excelente el lanchón. En el de mi padre cabían como 6 tanques de oxígeno y acetileno en el porta-equipáje para sus obras (es ingeniero retirado), que luego tenía que llevar de urgencia.
ResponderEliminarNostálgico el modelo, muy bueno.
Saludos !!
Muy lindo Cruiser!!!!! Repito, esta colección va de un extremo a otro, desde modelos olvidables a estos autos que dan ganas de tenerlos ya.
ResponderEliminarEl Bel Air se lo ve hermoso en ese tono, con las llantas acompañando.
Saludos!!!!!
A mi también me encantó, lástima del muñequito pero merece totalmente la pena.
ResponderEliminarComo bien dice Vasco, hay miniaturas de esa colección que están verdaderamente bien.
Saludos!