Desde la
misma aparición del automóvil a principios del Siglo XX, muchos entusiastas
alrededor del mundo se reunieron en clubes y asociaciones civiles con el objeto
de promover la masificación del uso de estas máquinas, que venían a cambiar la
historia de la movilidad humana. En nuestro
país, Dalmiro Varela Castex importó los primeros vehículos a motor a finales
del Siglo XIX. Su registro de conductor llevaba el número 1. Aquellas primeras
máquinas se mezclaban entre los carruajes tirados por caballos, principalmente
en los paseos domingueros en el remozado parque 3 de Febrero. Cerca de allí, en
la Sociedad Hípica
Argentina, se reunieron los primeros conductores para fundar el Automóvil Club
Argentino, el cual formalmente comienza su actividad el 11 de junio de 1904.
Los modelos
a seguir eran clubes similares fundados en Francia (1895), Bélgica (1896) e Inglaterra
(1897). El objetivo era difundir el uso del automóvil a partir de competencias,
promoción del turismo y servicios en rutas. En 1923 se crea dentro del Club la Oficina Topográfica ,
cuyo objetivo era el trazado y la distribución entre los socios de los primeros
mapas viales argentinos. La mitad
del importe de las cuotas sociales iba destinada a sostener el elevado costo de
mantenimiento de las flamantes rutas de tierra que se iban haciendo a medida
que el uso del automóvil se extendía. La División Carreteras
del Club se encargaba de esos arreglos.
En aquellos
tempranos años, y también como una manera de alentar el uso del automóvil, se
organizaban excursiones, la primera de ellas en 1910. Casillas de servicio eran
instaladas a lo largo de las rutas más concurridas, y luego, con el paso de las
décadas, en todo el territorio nacional, hasta en los confines más remotos era
dable encontrar los famosos carteles del ACA, en los que se garantizaba
servicio completo y de nivel tanto para vehículos como para conductores.
La
arquitectura de aquellas estaciones de servicio reflejaba el progreso y la
modernidad, extendiendo su red sobre todo el territorio. Campings y hoteles
también eran parte de la oferta del Club para sus socios, y siempre con la
intención de fomentar el turismo y por ende el uso masivo del automóvil. Otro
servicio inédito aparecido con la irrupción de las nuevas máquinas motorizadas
eran los garages, ya que las casas de entonces no contaban con esa dependencia.
Grandes galpones garages eran habilitados por el club en varias ciudades, y en
muchos de ellos también se despachaba nafta. La afiliación a la Federación
Internacional de Automóviles Club (posteriormente FIA) dio
como resultado convenios con otros clubes, por lo cual conductores extranjeros
obtenían aquí los mismos beneficios que los locales, y en reciprocidad, los
conductores afiliados al ACA podeían recorrer países extranjeros disfrutando de
lo mismo.
Revistas,
boletines, programas de radio y televisión, eran elementos útiles para la
propagación de las actividades del Club. La asociación con la petrolera YPF
permitió a los socios obtener descuentos en los precios de combustibles, y la
edificación de las famosas estaciones de servicio ACA-YPF, en un una cantidad cercana
a las 80 en todo el territorio.
La maqueta
que estamos viendo es el primer número de la serie “Vehículos Inolvidables de Reparto y Servicio”,
serie complementaria a “Autos Inolvidables Argentinos”, ambas editadas por
Salvat. La miniatura representa una unidad que prestó servicio en la provincia
de Mendoza, y actualmente se encuentra en el museo del ACA. Durante sus años de
servicio en la alta montaña, este vehículo era la asistencia técnico mecánica
para los socios del Club de aquellas latitudes. Llamando al Servicio del ACA,
la flota de Baqueanos se movilizaba tanto como para asistir a reparaciones de
urgencia, cambio de neumáticos o remolques. Sus siluetas amarillas eran
sinónimo de ayuda segura y solución de problemas.
La
miniatura presenta los mismos defectos en el molde que los ya comentados
oportunamente en la entrada de la
Baqueano de la serie Inolvidables. Como para contrapesar
aquellos insalvables errores, presenta una serie de aditamentos que la hacen
interesante, ya que logra con su decoración específica reproducir bastante
fielmente la unidad que descansa en el museo. Lo mejor son paragolpes, calcos,
patente histórica, retrovisores, faro auxiliar y las particulares máscaras de
las ópticas, que son las de un IKA Kaiser Carabela. Curiosamente en su frontal aparecen dos inscripciones que rezan "Kaiser". En el debe está el excesivo
grosor de la cadena de la grúa, y el faltante de los estribos laterales que
deberían estar en las bases de los guardabarros traseros.
CRUISER
Muy interesante la reseña del ACA.
ResponderEliminarY muy interesante el baqueano con grùa.
No quise comprarlo por cabezòn (yo, el autito tambièn), aunque podrìa haber comprado como donante.
Yo lo compré sólo por el precio promocional, ya tenía dos de este tipo y si el precio hubiera sido el actual quizás lo dajaba pasar. Saludos!
EliminarEs otro de los que no adquiero porque "todo no se puede",uno va orientando las incorporaciones de acuerdo al momento, la cuestion económica, etc.
ResponderEliminarEstan muy buenos las gráficas y el ecanismo, aunque por otro, como explicas, lado lleva los fallos del anterior Baqueano.
Saludos!
Así es. En este caso al menos hay otros detalles que desvían las miradas de los fallos..
EliminarSaludos!
Para ser el primer número estuvo muy bien, y a un precio totalmente anti-crisis. Y además histórico.
ResponderEliminarSe vende también en Salvat España, pero yo el que espero es el Olson de Bimbo. Lo tuvimos igual por aqui...
Saludos y que siga la fiesta!
No es el más lindo pero la colección promete mucho y se habla de piezas muy originales y bien resueltas que nos esperan.
EliminarSaludos!
Mas alla de que este fuera de escala es una excelente pieza y mas aun por lo que cuesta.
ResponderEliminarEso último inclinó la balanza en mi caso.
EliminarSaludos!
Concuerdo con Rogelio Roldán, la maqueta es 1/38 y no 1/43, la colección "Jeep Willy" - Baquedano si esta en escala 1/43 y es factible transformarla grua de ACA. Saludos
ResponderEliminarNo sé si es tanto un yerro de escala como yerros en las proporciones. Respecto a la estanciera el frontal, por ejemplo, es mas ancho, pero el capó tiene el mismo largo. De ahí infiero que sólo se trata de un descuido y de no haber caído en la cuenta de que se pudo haber partido de uno para hacer el otro.
EliminarSaludos!
Buena pieza, aquí Salvat tambien lo vende en su pagina web para el publico español al igual que otros vehículos argentinos..., por ahora no picado en comprar ninguno, no se cuanto aguantare...
ResponderEliminarUn saludo!
Si vas a elegir alguno te sugiero que esperes, que aparecerán otros mucho mejor resueltos. Veremos próximamente aquí el taxi Siam Di Tella, por ejemplo, que es una exquisitez.
EliminarSaludos!
El ACA, siempre recuerdo el escudo dorado en la parrilla del Torino de mi viejo.
ResponderEliminarLindo Baqueano.
Abrazo!