A
principios de los años 80s, Rumania estaba envuelta en una crisis económica,
fogoneada por el aumento en gastos armamentísticos de la Unión Soviética , en plena
Guerra Fría y crisis por la invasión a Afghanistán.
El gobierno
impulsó un plan de austeridad en todos los niveles de la administración, que
repercutió también en el nivel de consumo de la población. La burocracia gobernante quiso predicar con el
ejemplo, y dejar de lado los lujos innecesarios, materializados en el uso de
automóviles de representación de origen importado. La idea era desarrollar un
coche de nivel alto y fabricación local. Se llegaron a utilizar vehículos ARO
en desfiles y actos oficiales con el fin de alentar el consumo de automotores de fabricación local.
Dacia
contaba con el modelo “Dacia 2000”
que no era otro que un Renault 20 francés ensamblado en Rumania con autopartes
francesas. El número de Dacia 2000 era muy bajo, sólo los utilizaban los
dignatarios del régimen y eran de color negro o azul oscuro. Para ocupar el
nicho entre el elitista “Dacia 2000”
y el popular “1310” ,
los ingenieros de la industria local trabajaron en un proyecto que se mantuvo
en secreto por mucho tiempo.
Básicamente
partieron de componentes existentes para abaratar costos, y se basaron en el
Dacia Break. El resultado: un coche con ambiciones de “Premium”, que sin
embargo estaba directamente emparentado con el “coche del pueblo”. En
definitiva, un coche llamativo realizado con esfuerzos constructivos mínimos,
una copia bizarra del Renault 20. Un “Renault 12 con anabólicos”…
El Dacia
1320 fue en definitiva un hatchback de 5 puertas, y se fabricó entre 1987 y
1990. La mayoría fue destinada a funcionarios del Comité Central Comunista. A
pesar de que a la fecha de su aparición era el coche mas caro de la gama
Dacia, la mayoría de las 2.675 unidades fabricadas terminaron siendo
utilizadas como taxis.
La vida del
“1320”
fue corta. Ya en 1980 se fabricaron prototipos de lo que sería su sucesor, el
Dacia 1325. A
pesar de no haber sido un producto masivo, su escasez de recursos y su poco
vuelo estético, el Dacia 1320 cumplió un importante rol para la marca en
aquellos años en los que lo poco que se podía hacer era seguir estirando
comercialmente la vieja plataforma del Renault 12, hasta que la situación
política internacional decantara y se supiera hacia dónde soplarían los nuevos
vientos.
La
miniatura es del coleccionable rumano de IST/DeAgostini, y tiene retoques en
interior, llantas y caño de escape. Es notable que en el coche original se
utilizaron las mismas ópticas traseras del Dacia 1310 (Renault 12) pero los
creadores de la miniatura utilizaron un molde distino para materializarlas,
siendo que ya disponían de las del “1320” . Estas son más pequeñas y geométricamente
distintas. Es un detalle que no se entiende a la luz del rigor histórico que un
coleccionista pretende tenga toda miniatura de precisión.
CRUISER
Es raro y poco conocido por estas tierras, pero me gusta.
ResponderEliminarBuena pieza la del coleccionable, mas no se le puede pedir.
Saludos!
Francamente yo ignoraba su existencia hasta que lo ví editado..
EliminarSaludos!
No me extraña que sea raro en Argentina, si ya es rarísimo en Europa...
ResponderEliminarOtro caso en que me gusta más la miniatura que el original. Y el detallado que hiciste realzó aún más el modelo.
Curiosa pieza, y curiosa historia también.
Saludos!
Es casi seguro que este automóvil nunca cruzó las fronteras de Rumania.
EliminarSaludos!
es un pájaro!
ResponderEliminarno!
es un avión!
no!!
es muy feo!!!
100% de acuerdo!
EliminarSaludos!
pobre renault 12,
Eliminarlas cosas que han hecho en su nombre.
recuerdo el corcel, una camioneta con tracción trasera, y algún R12 coupe, para no mencionar los tuning.
yo sé que no es un auto lindo pero en su momento era lo más moderno que había.
y más allá de que sea lindo o feo, era un buen auto, duro y aguantador, como decía un amigo mío: "un falcon chiquito"
El 12 Gordini es una "perita en dulce"... me gusta mucho!
EliminarY en verde metalizado con vinilo negro es resultón.
Se ve que los Dacia no son de tu agrado, pero este autito tiene algo que me gusta (no se que es).
ResponderEliminarAbrazos!
PD: ¡El Dacia es mío!