Dentro de ese afán, la marca más utilizada, aún hasta el día de hoy, es Citroën. A pesar de que otras hubieron desarrollado modelos que muchos méritos hicieron para ocupar tal destacada función, como Simca o Renault, Citroën siempre estuvo en las preferencias de los mandatarios.
La historia comienza con los DS, que habiendo sido desarrollados en la Posguerra y presentados a mediados de los 50s, representaban el espíritu francés de recuperación y mirada hacia el futuro, con un producto totalmente revolucionario y rupturista.
El DS fue el elegido como símbolo de Francia, y utilizado por el gobierno como coche de representación, y el modelo que estamos viendo corresponde al que utilizó el presidente Charles De Gaulle a partir de 1963.
El 22 de agosto de 1962, el presidente De Gaulle viajaba con su esposa en el DS oficial, y un atentado provocó que el coche recibiera al menos 140 impactos de bala en su carrocería, los que también reventaron varios neumáticos (dos, tres o los cuatro según diferentes versiones).
La suspensión hidroneumática y la excelente estabilidad y maniobrabilidad que le confería, le permitió al auto escapar del lugar aún tras ese ataque, y éso salvó la vida del presidente y su esposa.
A partir de allí, De Gaulle no quiso movilizarse en ningún otro coche que no fuera Citroën, y esa tradición perdura hasta nuestros días.
La miniatura es de Norev, representa aquel vehículo presidencial y está muy bien realizada.
CRUISER
Me sorprendió lo del atentado y la huida a todo citroen.
ResponderEliminarEn lo personal me parece que el DS es muy bajo para ser presidencial, por suerte los sombreros son una costumbre en extinción.
Ojo que quizás está representado en posición detenida, acordáte que con la suspensión hidroneumática este bicho podía pararse como quisiera...
EliminarSaludos!
nop, me refería a altura interna,
Eliminaryo tomo como referencia las limousinas inglesas que tienen techo sobre elevado.
este citro es demasiado bajo, no me imagino un presidente "bajando" a sentarse en el auto.
Este sistema es tan especial que el auto puede seguir su camino con tres ruedas, la suspensión funciona solo cuándo el motor se enciende. Su línea es indiscutible y única. Es suave como una verdadera cuna de bebe
EliminarPrecioso modelo.
ResponderEliminarSobre el episodio escribió Frederick Forsyth la novela "El dia del Chacal" (y el guión de la película del mismo nombre). Según él, De Gaulle tenía un profundo desprecio por los conspiradores y mientras zumbaban las balas (una de ellas rompió el cristal trasero y pasó a pocos centímetros de la nariz presidencial) no se inmutó ni un ápice y mantuvo su altivo perfil. Cuando todo terminó y las ruedas del DS estaban desinfladas sobre el piso, el General De Gaulle salió del coche, se sacudió las esquirlas de cristal de la solapa, ayudó a su esposa a salir del auto y sentenció: "No tienen puntería".
Saludos,
Francisco
Buena data Francisco, gracias por el aporte!!
EliminarSaludos!
Titivillous, entré directo a comentar sobre el libro de Frederick Forsyth y la posterior película y me encuentro con tu comentario. Este atentado fallido de los miembros de la OAS a De Gaulle abre el libro, espectacular por cierto. Junto a "ODESSA" y "La alternativa del diablo" son lo mejor del autor. Dicho sea de paso, tengo los tres libros, y los debo haber leído al menos 3 o 4 veces a cada uno. Lástima que sobre "la alternativa..." aún no han hecho ninguna película.
EliminarDiego, espectacular miniatura de un coche que marcó toda una época.
Abrazos para ambos!
Es una absoluta belleza, el color, las líneas, ese techo corredizo es perfección pura, excelente por donde se lo mire Diego.
ResponderEliminarNo hay DS que no sea lindo, Laureano!
EliminarSaludos!
Un crack el conductor, en Wikipedia tenéis su vida descrita por si le queréis echar un vistazo. Un verdadero profesional.
ResponderEliminarMi padre tuvo la suerte de conocer a DeGaulle y estrecharle la mano, cuando estuvo de visita en España un año antes de morir (sobre 1970). En esos años mi padre era policía nacional y estaba destinado en Santander, al llegar el General al Palacio de la Magdalena saludó al cuerpo de guardia y mi padre quedó impresionado por el francés, un tipo que medía casi dos metros y bastante serio de porte.
En cuanto a la miniatura, la tengo realmente muy vista y me encanta pero no me decido a tenerla. Me gustan mucho los vehículos históricos pero creo que ya tengo suficientes DS. O es que nunca son demasiados?
Saludos!
Otra interesante historia, gracias por referirla Antonnio!. Respecto a tu última frase, para mí nunca son demasiados. Este lo tengo desde hace muchos años, más reciente es el azul con techo plateado que vimos hace poco, lo ví y lo compré, esa combinación era hermosa. Y así me pasa con todos los DS. Para mí nunca son demasiados!
EliminarSaludos!
Muy linda versión con em techo rebatible !
ResponderEliminarsaludos!
Nunca está de más otro DS y está versión histórica no falta a la cita. Y no me extraña que Norev presente una versión bien realizada, pues lo franceses cuidan lo suyo y lo promocionan hasta en estos detalles.
ResponderEliminarCómo no recordar el mítico Tiburón. Mis tíos de Francia venían cada tres años a Madrid. En sus breves visitas, siempre en coche, aparecieron sucesivamente con el DS 19 y 21, para acabar con un DS 23 poco conocido: el semiautomático de tres marchas
https://www.autobelle.it/en/a/For_sale_Citroen_DS_23_The.And._Pallas_Semiautomatica_-_6_P_225959.xhtml
con su característica palanca de cambios que se accionaba a través del volante monobrazo. Luego dejaron los DS para subirse al inolvidable SM.
Saludos.